Qué es un Balance de Situación

El balance de situación, también conocido como balance general, es un informe financiero que presenta una «foto» de lo que una empresa posee (activos), lo que debe (pasivos) y el valor de la empresa para sus propietarios (patrimonio neto) en un momento específico.

Puedes imaginarlo como una balanza que necesita estar equilibrada; de ahí su nombre. En un lado de la balanza tienes los activos, que representan los recursos que posee la empresa, como dinero en efectivo, inventario, maquinaria, edificios, entre otros.

En el otro lado, tienes los pasivos y el patrimonio neto. Los pasivos son las obligaciones que la empresa tiene con terceros, como préstamos o cuentas por pagar. El patrimonio neto, por otro lado, representa la inversión de los propietarios en la empresa, incluyendo capital aportado y las ganancias retenidas.

La importancia del balance de situación

El balance de situación es una herramienta crucial para los dueños de empresas, inversores y acreedores. Ofrece una visión completa y clara de la posición financiera de una empresa en un punto determinado en el tiempo.

Esto ayuda a los interesados a tomar decisiones informadas sobre la empresa, como determinar su solvencia, su capacidad para hacer frente a las deudas y su eficiencia en el uso de los recursos.

Si una entidad o persona quiere comprar una sociedad, lo primero que desea ver es un balance de situación de la empresa, ya que un experto contable podrá visualizar en que estado se encuentra económicamente y financieramente dicha empresa.

Ejemplo de un Balance de Situación

A continuación, se presenta un ejemplo simplificado de un balance de situación:

En este ejemplo, puedes ver que los activos de 80.000€ están financiados por los pasivos de 30.000€ y el patrimonio neto de 50.000€. Esto mantiene la ecuación del balance equilibrada (Activos = Pasivos + Patrimonio Neto).

Por lo que según el ejemplo, los Activos son 80.000€ y el Pasivo + el Patrimonio Neto son 80.000€.